One Piece [One Shots] - |Smoker x Lectora|«Fata» Morgians (+18) - Page 8 (2024)

 
Con agilidad, desabrochó el sostén, que cayó al suelo, y acarició sus senos, sorprendiéndose al sentirlos tan reales. Los agasajó y acarició, haciendo que su dueña suspirase en sus manos.
Una parte muy diminuta de su cerebro le dijo que era imposible que eso fuera una alucinación. Sin embargo, prefirió ignorarla y besar de nuevo a aquella mujer a la que al día siguiente tendría que volver a dar caza.
Ella le quitó el cinturón y abrió sus pantalones tímidamente, rodeando su miembro con las manos. Había hecho esto miles de veces a lo largo de los años, pero, por algún motivo, esta vez se sentía increíblemente nerviosa. Solo tenía una oportunidad y no quería desperdiciarla.
Una exclamación ahogada dejó sus labios cuando Smoker pellizcó uno de sus pezones, a la par que una fina capa de humo se colaba entre sus piernas.
Smoker sonrió al notar que estaba mojada.
—¿Quieres que te dé clases?— preguntó señalando su erección con la cabeza.
[Tn] se sonrojó y negó con la cabeza, mientras empezaba a mover sus manos alrededor de aquel trozo de carne en un ritmo que no convenció a Smoker.
El vicealmirante abandonó los pechos de [Tn] y obligó a la joven a agachar la cabeza.
—Usa la boca— ordenó empujando sus caderas hacia ella.
Sorprendentemente, Morgians obedeció de inmediato.
Smoker cerró los ojos mientras tocaba a la pirata y seguía ayudándola a mover la cabeza. Sentía su lengua recorriendo su glande y sus labios bajándole el prepucio lentamente. Ya no parecía tan tímida, sino toda una experta, ayudándose de sus manos para acompasar sus movimientos.
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Definitivamente, ella no era parte del decorado. ¿Por qué seguía allí?
¿Iba en serio lo de buscarle?
Recordó aquellas sonrisas burlonas que ella siempre le dedicaba y que ahora entendía que eran más bien sonrisas coquetas. Recordó la forma en la que ella siempre esperaba a que él llegara antes de desaparecer, y recordó la forma en la que, ese mismo día, se había relamido los labios al verle reflejado en el cristal de aquella copa.
«Oh, mierda. La copa»
Ahora entendía cómo había conseguido hechizarlo. Había estado esperándole, no le cabía duda.
—¿Por qué?— preguntó él. [Tn] dejó de succionarle. —¿Por qué yo?
—Porque te admiro. Eres el mejor hombre que he conocido.
¿Cuándo se habían conocido?
Smoker trató de recordar cuando habían comenzado sus encuentros.
—No pienses en eso ahora— pidió [Tn], lamiéndole de nuevo. —No tiene importancia.
—¿Qué quieres de mí?
—Antes no quería nada, solo charlar antes de irme.
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—¿Y ahora?
Ella pareció dudar antes de responder.
—¿Me creerías si digo que quiero que me hagas el amor?
Smoker soltó una carcajada. Amor. ¿Acaso existía esa palabra en el diccionario de un pirata?
Aunque la idea tampoco le desagradaba. Por todos los mares, ¿qué estaba haciendo?
—Dime al menos que no estamos en un sitio público.
—Estamos a unos ocho kilómetros de cualquier casa.
—Así que tenías todo planeado.
—No exactamente— respondió ella sonrojándose de nuevo.
El plan inicial era alejarse en cuanto hubiese conseguido llevar a Smoker a aquel almacén en el que había instalado un Den Den Mushi de escucha para poder hablar con él.
Gracias a su fruta, era capaz de controlar lo que su objetivo veía o escuchaba simplemente pensando en ello tras haber establecido contacto visual con él, ya fuera directo o a través de algún reflejo. Sin embargo, ella no podía ver lo que su objetivo veía ni escuchar lo que decían, por lo que, de otro modo, habría sido imposible mantener una conversación con Smoker.
Con el Den Den Mushi, habría podido escucharle y hablar con él, pero le pudo la avaricia al verle al alcance de su mano. Tan tranquilo y relajado tras haberse resignado a estar allí atrapado, que había llegado a tumbarse en el suelo, totalmente confiado.
—Entiendo— aseguró Smoker, terminando de desvestir a la joven y ayudándola a sentarse a horcajadas sobra él. —Sabes que, aun así, seguiré intentando arrestarte, ¿verdad?
—No esperaba menos de usted, vicealmirante Smoker— ronroneó ella, guiando su miembro hasta su entrada.
Smoker volvió a besarla, acallando de nuevo la voz que le decía que aquello era una locura, a la vez que se introducía en aquella cavidad tan apretada.
Marines y piratas no cuadraban. Era algo abocado al fracaso y, que además, iba en contra de sus propios principios. Pero, por una noche, fingiría que tan solo era un civil y que aquella hermosa mujer no era una prófuga.
 
           
 
 
Publicación: 04/12/2022
Palabras: 4.501
¿Qué pasó en Mystoria para que Morgians terminase tan encaprichada?
Seguro que en algún momento habéis oído hablar de los «Fata», más conocidos como «Hadas». 
Si además sois conocedores de leyendas artúricas, «Fata» Morgians os habrá recordado inevitablemente al hada Morgana cuyo nombre se utiliza para describir un curioso efecto bautizado como «Fata Morgana» en honor a este hada.
La fatamorgana es un espejismo o ilusión óptica que hace que a veces podamos ver sobre la superficie del mar objetos distorsionados o incluso flotando.
El nombre de la fruta, Uto Uto (うとうと), se corresponde con una onomatopeya japonesa para cabecear o estar medio dormido por lo que me pareció adecuada como nombre para las habilidades que tiene nuestra protagonista.
Espero que Smoker no haya quedado demasiado forzado. Ese hombre es tan serio, que la única forma en la que creo que podría dejarse llevar es engañarse a sí mismo intentando creer que no es real.